Sólo puedo hablar positivamnete del país que más he disfrutado de mi vida, aparte del que me vio nacer. Bolivia es uno de los lugares más hermosos del planeta, con una riqueza cultural que trasciende el sentido común. Un país que supera el centenar de lenguas, con una población idígena del 60% aproximadamente, cifra que se dispara en el contexto rural. He visitado el país en cinco ocasiones, por trabajo y como investigador. Si tienes la oportunidad de viajar a Bolivia no te puedes perder: La Paz; las Misiones Jesuíticas de la Chiquitanía que están declaradas patrimonio cultural de la Humanidad; Potosí, también ciudad Patrimonio, Samaipata, una roca enorme que corona un cerro tallado por los incas y Patrimonio de la Humanidad también; el Salar de Uyuni con sus 12.000 metros cuadrados de sal de Litio; Sucre, la capital de Bolivia y no La Paz como piensa mucha gente; el lago Titicaca, el más alto del mundo y de una belleza extraordinaria y el sitio arqueológico de Tiwanaku, la cultura madre de los Incas e Aymaras desde 3000 años AC. Para terminar, dos datos que te pueden chocar: Bolivia es dos veces la superficie de España, a pesar que en el mapa se ve muy pequeñito al lado de Brasil o Argentina y el 70% del país es selva, a pesar de la imagen estereotipada de país sólo andino.
Si quieres leer algunos de los trabajos que he publicado sobre este país puedes pinchar aquí. Si te interesa ver más fotos de Bolivia, te recomiendo la sección de fotografía etnográfica.