A punto de dar el salto para convertirme en fotógrafo profesional, esto es, aprovechar la fotografía como recurso para subsistir, hacer bodas, va a ser parte de las líneas de trabajo que pondré en marcha con el equipo con el que ahora comparto mi vida... Creo que será una experiencia enriquecedora y, estoy seguro, de que inicio una nueva senda de aprendizaje que no ha hecho más que empezar.
Las imágenes son de la boda de Fátima y Luis, dos amigos que hicieron su enlace de manera poco convencional, en una casa rural y en la que mis imágenes capturaron parte de ese día extraordinario.
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